Por: Ricardo Moreno Martínez
Se juega la última jornada del fútbol mexicano, pumas recibe al actual monarca de la liga. Los locales y visitantes se encuentran prácticamente clasificados a la liguilla y una victoria solo serviría para mejorar posición en la tabla general.
Una entrada pobre en el Estadio Olímpico de Ciudad Universitaria. Los guerreros a penas y logran llenar la parte superior de la cabecera sur.
El partido empezó movido, oportunidades para ambos equipos, aunque Santos empezaba a adueñarse del medio campo para adelante, al minuto 25 después de una serie extraordinaria de toques, que termina en los pies del “cabecita” Rodríguez para que este saque un disparo fulminante pegado al poste izquierdo que defiende el arquero de los pumas.
Nos vamos al medio tiempo, el primer tiempo, que fue dominado claramente por el equipo visitante; nos deja con un marcador de 1-0 a favor de los laguneros.
Comienza el segundo tiempo, pumas sale a buscar el empate para poder amarrar el tercer lugar. Pumas fue superior todo el segundo tiempo, sin embargo, faltaba el factor más importante; el gol.
Los locales llegaban una y otra vez, sin conseguir nada. Cuando el partido parecía ir encaminado a una victoria por parte de los visitantes. Surge al minuto 63 después de una serie de cabezazos y mal entendidos, la jugada donde el jugador de santos con el número 21, Dória, remata el balón con la cabeza hacia su portería, metiendo un autogol, que le da el empate a los felinos.
El silbatazo final se escucha, tras un empate, se viene la liguilla, donde Pumas enfrentará a tigres y Santos se medirá ante el Monterrey.
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